Establecer un Programa de Compliance robusto se ha convertido en una necesidad imperativa a causa de la proliferación de normativas y regulaciones que rigen la conducta de las empresas. Sin embargo, la falta de una guía regulada sobre los requisitos precisos de estos programas plantea cuestiones sobre cómo implementarlos

¿Qué deben contemplar un Programa de Compliance?

A pesar de que no contamos con una regulación exhaustiva en cuanto al compliance, existen dos documentos clave en España que ofrecen orientación: el artículo 31 bis.5 del Código Penal y la Circular 1/0216 de la Fiscalía General del Estado

Estos documentos se centran principalmente en el compliance penal, pero pueden ser utilizados como referencias para otros ámbitos del compliance.

Estas directrices son esenciales cuando se refieren a la prevención de delitos penales, porque determinan si el programa de compliance de una empresa puede mitigar o incluso eximir su responsabilidad penal si se comete un delito.

Principales Elementos de un Programa de Compliance Efectivo

  • Identificación de Riesgos: Reconocer las áreas de la empresa donde pueden ocurrir delitos y crear un mapa de riesgos. Es crucial estar al tanto de las leyes que afectan a la empresa y los desafíos particulares a los que se enfrenta.
  • Establecimiento de Protocolos: Diseñar normas internas y medidas que demuestren el compromiso de la empresa con el cumplimiento normativo. Aquí entra en juego la creación de un código ético y otras medidas específicas.
  • Recursos Adecuados: Asegurarse de tener el personal y los recursos materiales para llevar a cabo el programa de compliance.
  • Canal de Denuncias: Implementar un canal de comunicación que permita tanto a empleados como a terceros reportar posibles incumplimientos, garantizando siempre la confidencialidad.
  • Régimen Disciplinario: Establecer medidas internas para sancionar conductas que violen las políticas internas o externas, pero garantizando siempre el respeto a los derechos del individuo.
  • Revisión y Actualización: Evaluar y actualizar periódicamente el programa de compliance, especialmente después de un incidente o cambio significativo en la organización o en las leyes pertinentes.
  • Promoción de una Cultura Ética: Más allá de la mera documentación, es esencial fomentar una cultura que priorice la ética y el respeto a las leyes.
  • Documentación Clara: Todo programa de compliance debe estar bien documentado, ser preciso y adaptarse a la realidad de la empresa.

Conclusión

Establecer un programa de compliance implica establecer una cultura de integridad y responsabilidad. Las directrices mencionadas anteriormente son específicas para el compliance penal, pero los principios pueden y deben ser adaptados a todos los ámbitos del compliance.

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